Fase 1. Residencia del perro en el centro de adiestramiento
El perro deberá desaprender todas aquellas rutinas que ha ido adquiriendo desde cachorro y que han supuesto que tenga un comportamiento no deseado. Para ello es necesario desvincular del hogar todas esas premisas indeseables y es por esto que el primer paso que se lleva a cabo es la separación temporal del perro con su familia. De esta manera lo sacamos del contexto en el que se siente cómodo desobedeciendo y comenzamos su educación en nuestra residencia: un lugar nuevo para él, con nuevas normas que debe cumplir.
Fase 2. Formación teórica
Mientras el perro está siendo adiestrado, la familia debe aprender y asimilar una serie de conceptos sobre la tenencia responsable, educación y psicología canina y normas de convivencia en el hogar para garantizar el éxito del programa.
Fase 3. Formación práctica
Durante estas sesiones, los diferentes miembros de la familia aprenden a llevar a la práctica los conceptos que previamente han adquirido en las clases teóricas. El manejo del perro en la calle, cómo premiarlo o cómo corregirlo, cómo hacer para que el perro entienda qué le estamos pidiendo y cómo solucionar situaciones que pueden confundir al perro.
Fase 4. Adaptación al hogar y el entorno
Una vez el perro y la familia han terminado su formación, es el momento del reencuentro. Es entonces cuando se debe presentar el hogar como un lugar completamente nuevo para el perro en donde deberá aprender desde lo más básico qué se puede hacer y qué no.